Dentro del mundo de las auto refacciones es muy sencillo caer en la trampa de mitos y creencias equivocadas que pueden afectar tanto al rendimiento de tu auto como de tu bolsillo a largo plazo.
Muchas veces los consumidores no cuentan con la información necesaria y terminan tomando decisiones equivocadas o que solo se basan en mitos, lo cual solo puede terminar en problemas.
Si lo que quieres es asegurar la calidad de tus refacciones de autos y evitar problemas como el mayor desgaste prematuro, es esencial que conozcas los hechos detrás de los mitos más comunes que rodean a las refacciones de autos.
En esta nota exploraremos algunos de los errores más frecuentes en torno a las refacciones para carro, aclarando todo lo que necesitas saber sobre ellas para que tomes decisiones informadas, además de explicar ciertos mitos que rodean a estas piezas.
Cuando hablamos de refacciones de autos nos referimos a las piezas de recambio que tu auto pueda requerir para su correcto funcionamiento.
Estas piezas pueden venir de distintas fuentes, ya sean OEM (Original Equipment Manufacturer) o de otros fabricantes de piezas que sean compatibles. La diferencia radica en que las refacciones de importación suelen asociarse a una mejor calidad de producción, mientras que las refacciones nacionales pueden tener costos mucho más competitivos, pero sin comprometer la calidad.
Hablando de las garantías, tanto las refacciones de importación como las nacionales pueden incluir garantías en las refacciones, lo que asegura la calidad de los productos y protege, al mismo tiempo, al consumidor.
Por otro lado, muchas empresas, tales como distribuidores de refacciones de marcas reconocidas, te ofrecen políticas de cambios y devoluciones flexibles, lo que agrega un nivel extra de seguridad, al momento de adquirir repuestos.
Ahora veremos algunos de los mitos más comunes que se llegan a escuchar en torno a las refacciones de autos y a la industria de las auto refacciones:
Si bien las refacciones importadas cuentan con una reputación bastante sólida, esto no quiere decir que las refacciones nacionales tengan mala calidad. En bastantes casos la diferencia principal se encuentra en el precio, pero ambos tipos de piezas cuentan con altos estándares de calidad en su producción.
Esto es una completa mentira. Existen diferencias importantes entre las refacciones OEM y las fabricadas por terceros. Además, dentro de estas categorías, la calidad puede variar, según la marca, el fabricante y los estándares de calidad con los que cuentan.
Aunque este tipo de piezas están hechas por el fabricante original, cabe destacar que las piezas de recambio creadas por otras marcas también cumplen con los estándares de calidad que se necesitan para un desempeño eficiente y completamente seguro.
Recuerda que el precio no siempre es un indicador de calidad. Las refacciones más costosas no siempre son las mejores, y algunas refacciones que son más económicas pueden venir de distribuidores de refacciones confiables, garantizándote que no se tratan de productos de baja calidad.
Siempre es recomendable que las refacciones de autos que adquieras incluyan garantías, puesto que esto te asegura que cualquier tipo de problema o defecto que venga de fábrica será cubierto sin costos adicionales.
Estas refacciones de segundo uso pueden ser una excelente opción, siempre y cuando provengan de fuentes confiables. Piezas como motores o transmisiones tienen una muy larga vida útil si se cuidaron de forma adecuada, funcionando igual de bien que una nueva.
El mayor desgaste puede ser un indicador de diversos factores, como dónde recorre el vehículo los caminos, si está expuesto a lluvia, tierra u otros agentes naturales, etc., y no necesariamente está ligado a una mala calidad en la pieza. Hay veces que el desgaste prematuro puede ser por una instalación incorrecta o a que no hay un mantenimiento adecuado del auto.
Gracias a esta información y al conocer los distintos mitos que existen, es más sencillo que tomes decisiones más acertadas al seleccionar las refacciones adecuadas para tu auto, que alarguen el ciclo de vida de tu vehículo.
Recuerda siempre verificar la calidad, la política de cambios, los sistemas de devoluciones y las garantías en las refacciones, para asegurarte de que es una compra confiable y segura.
